Bienvenidos a esta nueva actualización de «El Rey Planeta».

Como bien sabeis el Rey Planeta es un juego en solitario, con una variante para jugar en modo cooperativo. La vocación del juego siempre fue la de solitario: un rey contra el mundo. Sin embargo, a medida que avanzabamos en el desarrollo del juego, Yves Roig se dio cuenta que el juego iba muy bien a dos, un jugador como rey y el otro como valido del rey. Poco a poco dimos forma a la idea y quedó claro que, en su justa correspondencia histórica, ambos roles deberian ser igual de importantes.

En un primer momento se asignaron acciones diferentes a cada jugador (en resumen, las acciones reales para el rey y las acciones politicas y de gobierno para el valido) y se dividieron los puntos de victoria, de tal manera que ambos jugadores pudieran hacer cosas distintas y puntuasen distinto. Esto funcionó muy bien, el rey se encargaba de sus asuntos y el valido del gobierno, si bien el rey se reserva algunas acciones y cartas para su uso exclusivo (para algo es el rey…).

En este punto no conviene olvidar que Felipe IV SI se dedicó a gobernar; o al menos, más que otros reyes de la casa de los Austrias, como su padre Felipe III. El Rey Planeta dedicó gran parte de su tiempo al gobierno del reino, si bien dejaba una serie de tareas más o menos rutinarias para su valido de confianza. De esta manera, por ejemplo, en el Rey Planeta el jugador que representa al valido solo puede declarar una guerra con el acuerdo del rey.

Parecia sencillo; y lo era, asi que decidimos complicarlo un poco mas. Para ello se diseñaron las cartas de Memorial Secreto, tareas secretas que deben realizar los jugadores. Historicamente hablando el más conocido es el Memorial de la Unión de Armas, que al final acabó con la carrera del Conde Duque de Olivares.

Estas cartas de memorial secreto funcionan como una «agenda oculta«, que los jugadores solo pueden ver una vez comenzada la partida. En general los memoriales secretos se orientan a que los jugadores rivalicen entre si (por ejemplo vigilando la virtud del rey) y proporcionan o restan puntos de victoria extra segun su grado de cumplimiento.

El rey tiene a su disposicion 8 cartas de memorial secreto, mismo número que su valido, pero todas distintas entre si y con tareas diferentes para cada uno. Cada jugador conoce su tarea pendiente pero no conoce la de su rival/amigo, por lo cual una buena táctica consistirá en tratar de encontrar esta tarea.

Pero atención, aún es posible que ambos jugadores pierdan, por lo que el juego es cooperativamente competitivo o competitivamente cooperativo.

Pero no me creais a mi, haceros con una copia del juego, con un amigo, y disponeos a defender el Imperio:

PD: el juego en solitario opcionalmente puede incluir el memorial secreto.